Diseño de producción: Simon Beresford
Vestuario: Jacqueline Durran

Festival de Cannes. Selección Oficial. Competición.

Another year. Primavera, verano, otoño e invierno. Familia y amistad. El amor y la calidez. Alegría y tristeza. La esperanza y la desesperación. Compañerismo. La soledad. Un nacimiento. Una muerte. El tiempo pasa... Gerri (Ruth Sheen), terapeuta, y Tom (Jim Broadbent), geólogo, llevan muchos años felizmente casados, aunque les preocupa que su hijo Joe (Oliver Maltman), que es abogado, permanezca soltero. Esta preocupación les impide darse cuenta de hasta qué punto María (Lesley Manville), una compañera de trabajo de Gerri, depende de su amistad.

El cine británico tiene en Mike Leigh, Ken Loach y Stephen Frears a un tridente de oro, especializados en crónicas casi siempre contemporáneas de una sociedad que mira hacia el presente con ira y al futuro con miedo. Loach es el más político y Frears el más infiel, mientras que Leigh no he cejado en su empeño de retratar a la clase media y baja. Sin la dureza de antaño, pero no olvidemos que suya es también El secreto de Vera Drake, y de eso no hace tantos años.

Dividida en las cuatro estaciones del año (recurso fácil pero efectivo), Another Year está presidida por el matrimonio formado por Broadbent y Sheen, cuya envidiable estabilidad y felicidad atrae a perdedores e infelices como el más poderoso imán. Hasta su hogar llegan una serie de personajes en busca de algo indefinible: quizá la calma, quizá el secreto de vivir, que diría Capra; quizá las fuertes raíces del árbol de la vida, que diría Malick. Al contrario de otros títulos anteriores del cineasta, se trata de un Leigh sonriente, optimista, que ofrece una salida hasta a los más desesperados. Una historia sombría “ma non troppo”, siempre en busca de la luz, sea cual sea la estación en la que nos encontremos.