V.O. con subtítulos en gallego
Durante mucho tiempo fue considerada la película más exitosa de la Argentina. Y casi setenta años después de su estreno, sigue siendo un importante referente, lo que le da la categoría del mejor clásico argentino. Lo que tiene de impresionante esta película no es sólo su pretencioso despliegue de producción, si no que, pese a esto, fue realizada por una compañía de cine que no poseía estudios propios, ni contaba con ninguna infraestructura, tanto económica como administrativa. El único capital con el que contaba era el renombre de los integrantes de la compañía.
Artistas Argentinos Asociados había decidido que esta película debía ser su obra inicial, pero por inconvenientes debieron poner en marcha otro proyecto. Ellos estaban convencidos de que la propia historia tiene mucho material que el cine puede utilizar para contar. Luego de un profundo estudio, se decidieron que los episodios de la guerra de la independencia llevados a cabo por los gauchos de Güemes era el tema que buscaban. Se basaron en los escritos del importante escritor Leopoldo Lugones, que narraban diferentes episodios de aquellos acontecimientos. Compraron los derechos del libro a uno de los herederos, un hijo policía de alto rango, que no se vio muy interesado en el tema y lo vendió por poco dinero, lo exótico es que también exigió que se le entregara un disco de jazz que no se conseguía en el país.
Luego los talentosos escritores y poetas Homero Manzi y Ulises Petit de Murat se encargaron de un difícil guión.
El rodaje se llevó a cabo en el mismo lugar de los hechos, la linda provincia de Salta, al norte del territorio, limítrofe con lo que fue el Alto Per en su momento. La producción demandaba un pretencioso presupuesto, ya que la historia se centraba a principios de 1800 y además de eso, debían filmar episodios bélicos.
Los muchachos de las tres A se había encargado de darle muchas vueltas al asunto para poder realizarlo. Contaron con apoyo del gobierno nacional y de particulares de la provincia de Salta. El entusiasmo y anhelos de realizar una buena obra hizo que gastaran de más y a mitad del rodaje se quedaron sin dinero. Pero con esas mismas ansias, le dieron más vueltas y lograron finalizar un excelente film.