LORDEMANI


Sección: 
Arte de Cine
Día y hora: 
Sábado, 21 Octubre, 2017 - 19:00
Lugar: 
Museo Provincial
País: 
España
Año: 
2016
Duración: 
47 minutos
Director/a: 
Brais Revaldería.
Sinopsis:

Desde hace más de 10 siglos, Galicia guarda una gran relación con el pueblo vikingo. Las diferentes oleadas vikingas en las costas gallegas hicieron que a día de hoy esa esencia aún se pueda apreciar en celebraciones como la de Catoira (Pontevedra), pueblo hermanado con la ciudad Danesa de Fredrikssund. Conocidos por su fortaleza y por ser guerreros invencibles, los vikingos llegaron a Galicia atraídos por el oro y las riquezas que los romanos dejaron como legado. En el año 844, los vikingos asediaban Galicia por primera vez siendo ésta la primera de las cuatro incursiones que realizarían hasta doscientos años después. En el año 1028, las tropas vikingas dirigidas por “Ulf el gallego” asaltaron las poblaciones que se encontraban a su paso por la ría de Arousa hasta que fueron rechazadas por el ejército del Obispo Cresconio de Compostela, que ordenó edificar lo que hoy conocemos como las Torres del Oeste. Esta fortificación impediría a los Lordemani remontar el río en busca de las riquezas de Santiago e Iria Flavia. Uno de los pueblos fundamentales en la historia vikinga de Galicia es sin duda Catoira, una villa marinera que durante siglos sufrió los constantes asedios de los Lordemani. Como recuerdo de las continuas acometidas vikingas, desde 1960, todos los años el primer domingo de agosto, Catoira celebra un desembarco vikingo. Subidos en réplicas de los drakares del siglo XI, los invasores llegan a la costa para asaltar las torres del Oeste. Más de 10 siglos después, los Lordemani de Frederikssund (Dinamarca), que celebran la Vikingespil todos los meses de junio, y los habitantes de Catoira se reúnen en esta zona de la costa Gallega para celebrar el pasado histórico que los une. Daneses y españoles unidos por la historia y ahora por lazos de amistad tras más de 25 años de celebraciones conjuntas, nos muestran una vez más que las diferencias raciales, culturales o de idioma no son impedimento para el entendimiento y la colaboración entre las partes, en una época en el que los separatismos y las tratos discriminatorios hacia raza o religión han llegado a acentuarse en países del primer mundo. Lordemani es una muestra de la cultura y el carácter común de dos poblaciones que, sin llegar a entenderse verbalmente, son capaces de coexistir y crear lazos duraderos de amistad dejando a un lado diferencias o rencillas del pasado.